Título: El Despertar de los Héroes.
Título Original: The Great Hunt (1990).
Saga: La Rueda del Tiempo (2/20).
Autor: Robert Jordan.
Editorial: Timunmas.
Precio: 21 €.
Género: Fantasía Épica.
Núm. Páginas: 472.
Continuación: de El Ojo del Mundo.
Continuación: en El Dragón Renacido.
Las fuerzas del mal se agitan y tienden sus garras sobre el mundo, al mismo tiempo que surgen señales que auguran la proximidad de la Ultima Batalla, donde ha de decidirse la suerte de la humanidad.
Según afirman las profecías, en ella tendrá que luchar el Dragón Renacido para proteger a la Luz del avance de las Tinieblas. Padan Fain, un siniestro seguidor del señor de la Oscuridad, ayudado por las abominables criaturas que componen sus ejércitos, roba el Cuerno de Valere, un objeto decisivo para decantar la supremacía en el combate. Rand y sus amigos parten en su persecución en compañía de un pelotón de soldados del reino de Shienar. El largo y azaroso viaje los llevará hasta los confines del continente, donde al fin recuperan el Cuerno, y a cuya llamada acuden los héroes de todas las eras. Entretanto, Rand averiguará inquietantes detalles acerca de su origen y de su verdadera identidad, y la vorágine de los acontecimientos lo obligará a ocupar un lugar fundamental en el desenlace de la historia del mundo.
Según afirman las profecías, en ella tendrá que luchar el Dragón Renacido para proteger a la Luz del avance de las Tinieblas. Padan Fain, un siniestro seguidor del señor de la Oscuridad, ayudado por las abominables criaturas que componen sus ejércitos, roba el Cuerno de Valere, un objeto decisivo para decantar la supremacía en el combate. Rand y sus amigos parten en su persecución en compañía de un pelotón de soldados del reino de Shienar. El largo y azaroso viaje los llevará hasta los confines del continente, donde al fin recuperan el Cuerno, y a cuya llamada acuden los héroes de todas las eras. Entretanto, Rand averiguará inquietantes detalles acerca de su origen y de su verdadera identidad, y la vorágine de los acontecimientos lo obligará a ocupar un lugar fundamental en el desenlace de la historia del mundo.
Robert Jordan ha escrito una de las mayores sagas de fantasía del mundo, tan larga es que al final sucedió lo que todo fan teme que ocurra: el autor murió varios tomos antes de terminarla. Supuestamente murió a falta de un tomo para terminarla, me hace gracia como el que tomó las riendas, Brandon Sanderson, tardó los tres tomos más gordos de la saga en llegar a su fin. Pero bueno, no es de eso de lo que vengo a hablar.
Yo he empezado la saga recientemente. El año pasado me leí el primero (tomando en cuenta la edición original, que en España dividieron cada tomo por la mitad) y hace poco me he leído el segundo (digamos que en la edición española serían los tomos 3 y 4). Así que aún me falta mucho por leer para llegar a la etapa de Sanderson, pero poco a poco y dejando que la curiosidad me pique para poder seguir leyendo.
No sé si llegué a comentar el libro anterior, pero Jordan ni es muy buen escritor ni sabe hacer que el camino sea interesante. Esto lo traduzco en que cada principio y cada final de cada libro suele ser bastante épico y hasta interesante a nivel de historia, pero el camino que lleva de ese principio a ese final, es bastante aburrido. Mucho de "ahora estamos aquí, y luego aquí, y nos hemos alojado en tal posada donde el posadero es tal fulano". Demasiado de eso. De eso y de situaciones que no llevan a ningún lado alargadas hasta el absurdo. Por no añadir la poca curiosidad que hace que sienta por el mundillo tan amplio donde la acción se lleva a cabo.
Hay, no obstante, tres puntos que llaman mi atención y de los que todavía no sé lo suficiente: Aes Sedai, Aiel y Lews Therin/Artur Hawkwing.
Otro punto del libro es el uso de damane, que a mí particularmente me pone enferma, pero admito que es una de las mejores cosas del libro, tema bastante bien tratado y que más relieve dan a los personajes, algo que les conviene sobre manera, porque especialmente los muchachos son planos como una hoja de afeitar, simples hasta no poder más y estúpidos hasta la uña del meñique. Si habéis leído el libro, perfectamente podéis no estar de acuerdo conmigo, pero por poner un ejemplo: la quinta vez que Rand repite que no es quien dice las aes sedai que es, me entraron unas ganas terribles de darle un par de voces y decirle algo así como "¡cualquiera que vea a un dios se da cuenta antes que tú!"
Siempre me extrañó como en un libro de fantasía sus personajes son tan reacios a aceptarla. Pero admito que es un toque bastante interesante en un libro de este calibre.
Y por ahora dejo la reseña. Cuando lea más, seguiré despotricando sobre los libros. Tal vez incluso les saque alguna virtud. Ah, que conste que la historia me gusta mucho. Lo que no me gusta tanto es como la explican, que lo hacen un poco largo y rollero, pero la historia, mola.
1 comentario:
¡Hola!
No me gusta mucho este autor, así que no creo que lea este libro.
Igualmente gracias por la reseña y me quedo por aquí :3
¡Besos!
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